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El sector porcino, en emergencia por el brote de Aujeszky: piden vacunas

Desde la Federación Porcina Argentina solicitaron importar vacunas a las autoridades del Senasa. Además, reforzan la bioseguridad en las granjas del país frente a esta enfermedad. Dos Florines

A raíz del brote de la enfermedad Aujeszky que ha afectado a diversas granjas de cerdos del país, la Federación Porcina Argentina (FPA) junto a las empresas en cuestión ha mantenido diversas reuniones con el Senasa con el objetivo de que se tomen las medidas necesarias, con carácter de emergencia, para controlar y evitar la diseminación de la enfermedad y las pérdidas económicas asociadas.

En los últimos días, representantes de la FPA y de las granjas afectadas participaron de una serie de reuniones en las que se analizó la situación actual de los establecimientos. Por parte del Senasa estuvieron presentes Rodolfo Acerbi, vicepresidente, Ximena Melon, directora Nacional de Sanidad Animal, y Alejandro Pérez, jefe del Programa Nacional Sanitario Porcino.

Importación de vacunas

Luego de analizar la situación y habiéndose descartado la posibilidad de implementar un plan de saneamiento basado en despoblación y repoblación como alternativa al faltante de la vacuna por virus muerto aprobada en Argentina, y sumado a las nuevas sospechas de contaminación por signos clínicos compatibles con Aujeszky, se definió solicitar al ente sanitario la importación de la vacuna viva atenuada del virus naturalmente deleteado (DIVA) de Aujeszky.

De acuerdo a la gravedad de la situación, el Senasa invitó a la FPA a participar de una reunión de la Comisión Nacional de Lucha contra las Enfermedades de los Porcinos (CONALEP) en la que se brindó información acerca de la situación y se decidió conformar un comité de crisis. El mismo, que estará integrado por la FPA, la Cámara de Laboratorios y las empresas afectadas, será el encargado de definir los pasos a seguir para la importación de la vacuna y el posterior muestreo de las dosis necesarias para contener el brote en las zonas afectadas.

Gracias a esta serie de encuentros con las autoridades sanitarias se lograron identificar puntos importantes que hacen a la seguridad de las granjas. Entre ellos, podemos destacar la importancia de contar con un médico veterinario que se encuentre acreditado ante el Senasa, como también el deber no solamente del laboratorio, sino también de las granjas, de informar y denunciar rápidamente ante la oficina del Senasa regional si se presentan síntomas o irregularidades.

“Enfatizamos en que el trabajo en conjunto entre las autoridades sanitarias competentes, la FPA como representación sectorial y los productores afectados, es la vía adecuada para generar conciencia y asegurar que quienes forman parte del sector estén alineados y actualizados en materia de bioseguridad“, destacaron desde la entidad en un comunicado.

Por último, informaron que la Federación ya formalizó ante las autoridades del Senasa el pedido con carácter de emergencia para la importación de 1.200.000 dosis de la vacuna para evitar la propagación de la enfermedad Aujeszky, “reforzando nuestro compromiso como institución para continuar trabajando en pos de un sector porcino fuerte y próspero”.