Realidad y mentiras sobre las drogas en México
La información que las personas tienen respecto a las drogas puede ser muy variada, porque la encontramos en todos lados: televisión, cine, internet, amigos o vecinos, etcétera. Pero, muchas veces, esta información no es exacta y se halla muy contaminada por las diversas formas de pensar de la gente. A continuación se presentan algunos de los mitos más comunes que se tienen sobre las drogas, junto con su contraparte, la realidad:
- Quien consume drogas puede dejar de hacerlo cuando quiera. Si, pero depende del grado de dependencia a una droga. Generalmente, sólo se puede abandonar el consumo con la ayuda de un programa de recuperación y con la asistencia de experto.
- Los efectos de la mariguana desaparecen después de unas cuantas horas. Los trastornos de memoria, concentración, coordinación y reflejos, entre otros, pueden permanecer hasta por tres dias a partir de un consumo de mariguana.
- La cocaina es adictiva sólo si se inyecta. La cocaina produce adicción muy rápidamente sin importar la via de consumo: aspirada, fumada como crack, o inyectada.
- Las drogas alivian el estrés y ayudan a soportar los problemas. Los efectos de ciertas sustancias mientras duran, pueden hacer que los problemas se olviden, pero cuando éstos cesan, los problemas probablemente aumentarán.
- Con café cargado se baja la borrachera. Una vez que el alcohol ya circula por la sangre, sólo el tiempo podrá eliminarlo.
- La inhalación de thinner o cemento produce efectos tan rápidos que no da tiempo de que dañe el organismo. Los inhalables se introducen en la sangre en segundos y circulan por todo el cuerpo, lo que puede causar ataques del corazón o muerte por sofocación, pues reemplazan al oxígeno en los pulmones.
- El tabaco masticado o aspirado («rape») no hace daño. En ambas formas de consumo existen riesgos importantes como cáncer de boca y afección de los bronquios, hipertensión arterial, problemas dentales, pérdida del gusto y del olfato, etcétera.
- Se necesita consumir drogas por mucho tiempo para que empiecen a hacer daño. Desde la primera vez que se consume una droga adictiva existen riesgos a veces graves (por ejemplo: ataques cardiacos, convulsiones, crisis de pánico, etcétera).
- Si se compra la droga a vendedores conocidos, se asegura su pureza. Nadie puede asegurar la pureza de las drogas adictivas no médicas que son ilegales (salvo las bebidas alcohólicas o el tabaco).
- Una mujer embarazada que consume drogas no puede dañar a su hijo. Las sustancias adictivas afectan al feto tanto o más que a la madre, el niño puede nacer antes de tiempo, morir o sufrir daños fiscos y mentales.