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Marea negra

Científicos duplican estimación del derrame de crudo

Un grupo de científicos del gobierno estadounidense elevaron al doble la estimación del volumen de petróleo que se escapa del pozo averiado en el Golfo de México. El presidente del grupo responsable del derrame, British Petroleum, fue convocado a una reunión en presencia de Barack Obama, el próximo miércoles en la Casa Blanca.

La explosión y posterior hundimiento de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon" de BP en abril del año pasado mató a 11 trabajadores y provocó el derrame de 780 millones de litros de crudo frente a las costas del estado de Louisiana.
La explosión y posterior hundimiento de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon" de BP en abril del año pasado mató a 11 trabajadores y provocó el derrame de 780 millones de litros de crudo frente a las costas del estado de Louisiana. © Reuters
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Hasta ahora, las autoridades pensaban que del pozo se escapaban unos 12.000 a 19.000 barriles diarios. Pero el jueves, un grupo de científicos estimó que el flujo podría ser de hasta 40.000 barriles cada día, lo que representa unos 6,36 millones de litros, según anunció Marcia McNutt, directora del Instituto de geofísica estadounidense (USGS).

Las autoridades esperan recoger del mar hasta 28.000 barriles de petróleo dentro de poco, en labores de aspiración.

Esta nueva estimación sobre la magnitud del derrame podría tener consecuencias financieras para la petrolera. Bajo la ley de Aguas Limpias, BP y otras compañías podrían exponerse a multas de hasta 4.300 dólares por cada barril vertido en las aguas del Golfo de México.

Convocatoria a la Casa Blanca

El presidente del grupo británico BP, Carls-Henric Svanberg, fue convocado ayer a una reunión sobre la marea negra en presencia de Barack Obama, el miércoles en la Casa Blanca.

Esta convocatoria fue emitida por el comandante de los guardacostas estadounidenses, el almirante Thad Allen, quien coordina las operaciones de la administración Obama para tratar de contener la catástrofe.

BP enfrenta una presión cada vez mayor del gobierno estadounidense por las consecuencias desastrosas sobre el medioambiente en las costas de Luisiana y Florida, principalmente.

Por otro lado, el Primer ministro David Cameron dijo que el Reino Unido está dispuesto a ayuda a la compañía a lidiar con el derrame. Cameron señaló durante una visita a Afganistán que este tema será objeto de una conversación telefónica entre el Primer ministro británico y Obama, este fin de semana. De su lado, el Departamento de Estado aseguró que la marea negra no constituye un tema de tensión entre Londres y Washington.
 

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