«Prociudadanos hace un esfuerzo de transparencia ante el país, asumiendo los riesgos, para decirle al país que en Venezuela hubo un proceso irregular. Nosotros creemos que estamos ante un fraude electrónico». Así lo dijo Leocenis García, coordinador nacional de ese movimiento político.
García resaltó que, de acuerdo con un exit poll que manejan, la abstención en el proceso convocado por el régimen se ubicó en casi 80%. «El exit poll que manejaba el gobierno dice que la participación es del 23% y que las abstención fue de 77%. Eso no corresponde con los resultados presentandos por el Consejo Nacional Electoral» (participación de 30,5%).
Agregó: «Tenemos las actas y en el movimiento Prociudadanos sabemos lo que ocurrió el domingo en Venezuela. Son muchas las incidencias y le presentamos al país un informe que demuestra que lo que ocurrió no está reflejado en el resultado electoral».
El coordinador de prociudadanos también denunció que muchos de sus testigos tuvieron dificultades para entrar a los centros de votación. «Los funcionarios del Plan República no permitieron la entrada de testigos de Prociudadanos, argumentando que solo podían estar testigos del PSUV y de la denominada mesa de diálogo. El CNE nunca explicó al Plan República que debían permitir la entrada de todos los partidos. Recibimos llamadas de todos los testigos en el territorio nacional para denunciar esta situación».
Aseguró que se registraron los llamados «puntos rojos» en los que se le exigía a los ciudadanos votar por el oficialismo, pues de lo contrario perderían los beneficios otorgados por el régimen de Nicolás Maduro.
«Los miembros de las Unidades de Batalla Hugo Chávez (UBCH) obligaban a las personas a ejercer el voto a su conveniencia y posteriormente debían pasar por los puntos rojos para que cada elector diera sus datos, su cédula y su carnet de la patria. De lo contrario, eran amenazados de perder beneficios sociales, como las bolsas CLAP».
Añadió: «Hay candidatos que votaron por ellos mismos y ese voto no se ve reflejado en los resultados del Consejo Nacional Electoral. Si el elector tardaba más de 10 segundos emitiendo su voto, la máquina votaba automáticamente por el PSUV».
Leocenis García también indicó que «durante el cierre de las mesas, en ninguno de los centros se pudo corroborar los votos de caja con los electrónicos. La única garantía que existía era que el resultado de la máquina coincidiera con los votos de las cajas, pero eso no ocurrió».
Finalmente, consideró ilegal que el CNE extendiera el horario del cierre de los centros electorales. «Hubo centros de votación en los que no llegaron los miembros de mesa, siendo sustituidos por los testigos de los partidos, en su mayoría por los del PSUV. Si la participación fue de 20% cómo es que dieron una prórroga, si no habían electores en las colas».